SHANGHAI: TODO MENTIRA

Hola de nuevo!

Aqui sigo, en Shanghai, un poco harto ya porque esta ciudad no da mucho de si (o a lo mejor es que yo no he sabido encontrarle el punto). Finalmente mis dias de "soledad" se acabaron, porque el sabado por la manyana aparecieron por aqui, como por arte de magia, Xavi y Ferran, aunque solo con una mochila. La mochila de Xavi fue vista por ultima vez en Bruselas. Asi que estos dias hemos estado llamando a aeropuertos de medio mundo siguiendo el rastro de la mochila (en la que lleva lo necesario para viajar 9 meses) y finalmente esta manyana la hemos recuperado en el aeropuerto de Shanghai. Aprovechando la coyuntura hemos tomado el Maglev, el primer tren comercial de levitacion magnetica. Es un trenecito que literalmente vuela y no usa catenaria, sino que es atraido por el tramo de via que tiene justo delante, siguiendo el viejo principio del burro que persigue la zanahoria. Tiene una velocidad punta de 430km/h y un precio de 5 euros el trayecto, por lo que hemos decidido volver en metro. Lo que no sabiamos es que el metro tarda hora y media... Asi que con esto hemos echado la manyana. Por la tarde hemos ido a comprar los billetes de bus para ir a Huangshan (la montanya amarilla), actividad que nos ha llevado unas 3 horas. Y aun hemos tenido suerte de que nos acompanyaran unas chicas bielorrusas que estan en el hostal y hablan chino, porque si no creo que no lo conseguimos.


Ayer estabamos en la zona de los rascacielos cuando el cielo tornose negro, empezaron a formarse remolinos de aire y... la tormenta perfecta. Miles y miles de chinos corriendo y gritando como si el agua les quemara, refugiandose en cualquier rincon posible. Nada, un cuarto de hora en el que cayo toda el agua del mundo, y otra vez a la calle, con una temperatura mucho mas agradable. Fuimos a ver el rio (el pequenyo, por el que pasan barcos mercantes enormes) y la zona del Bund y Pudong iluminadas. Pero resultaron no estar muy iluminadas porque ayer se cumplian no se cuantos anyos del terremoto en China y estaban de luto. Pero hoy si hemos visto los rascacielos iluminados, con todos sus anuncios y sus pantallas gigantes y todo eso. Es espectacular, pero bastante bastante hortera. Eso si lo tienen los chinos, son muuuy horteras. Esta noche tambien hemos ido a la "old town" ("lo viejo") que de viejo no tiene mas que la intencion. Es como la China de Port Aventura pero con chinos y sin atracciones, y queda un poco mas lejos de Mexico. Las casas son todas copias de la arquitectura tradicional de los templos chinos, con miles y miles de bombillas alrededor de la silueta y con varios centros comerciales ultimo modelo entre medio. Muy cutre.


Pero lo mas espectacular del dia (y recordad que hemos subido a un tren que vuela a 430km/h) ha sido el trayecto en un autobus urbano, a una velocidad de vertigo, esquivando peatones, coches, bicis, motos, y lo que se le pusiera por delante, tomando las curvas lo mas rapido, rozando el resto de coches y pitando, pitando todo el rato, sin parar. Tenemos un video que atestigua semejante experiencia.


Otro medio de transporte bastante espectacular ha sido tambien la bicicarro electrica, con asiento para una persona, en la que hemos subido los tres (despues de negociar el precio, que hemos bajado de 10 euros a 2), en la que obviamente no cabian nuestros tres gordos culos, por lo que ibamos sentados medio fuera, y circulando por las calles repletas de peligrosos autobuses urbanos. Hemos llegado sanos y salvos.


Y nada, manyana llega Esteve, con lo que completamos la formacion. Llega a las 7 de la manyana, le haremos un "Shanghai: the very best of" y al dia siguiente a levantarnos a las 5, encontrar nuestro bus y hacia Huangshan que nos vamos, a ver que pasa por alli. El bus tarda, segun nos han dicho, "5, 6, 7, 8 horas". Minuto arriba minuto abajo.


Os dejo el link del blog de Xavi y Ferran (en catalan) por si quereis entrar a churrutear un poco http://catamons.blogspot.com


Esto es todo lo que se me ocurre de momento.


A cuidarse, y hasta mas leer!